Cambio de los discos de frenos

Los discos y las pastillas de freno son los principales componentes del sistema de frenado, por lo que es importante mantenerlos en correcto estado.

La vida útil de estos componentes va a depender del tipo de conducción y/o del tipo de carretera que se transita habitualmente. Como por ejemplo si se conduce por vías con mucha pendiente se va a dar un uso mayor de los frenos y por ende se da un desgaste prematuro de los mismos.

En qué momento nos damos cuenta que debemos cambiar los discos:

  • Ruidos al pisar el pedal de freno.

  • Tacto del pedal duro o profundo (la distancia de frenado ha aumentado).

  • El volante vibra al pisar el pedal de freno.

Los discos de frenos se deben cambiar debido a las siguientes averías:

  • Discos de frenos desgastados: Los discos de frenos tienen un mínimo de grosor que no se debe de sobrepasar. El punto de desgaste que indica que se deben cambiar los discos de freno puede verse observando la marca de grosor mínimo que se encuentra en el lateral del disco.

Discos de frenos rayados: Si se abusa de los frenos, es probable que se produzca esta avería que se puede identificar por un cambio de color en los discos de freno y que provoca vibraciones en el volante durante el frenado.

Anterior
Anterior

¿Cómo lograr que un taller sea rentable?

Siguiente
Siguiente

Cambio de aceite: errores comunes